Debemos tomar conciencia sobre cómo disminuir el desperdicio de alimentos. Cada año, en el mundo, se arrojan a la basura 1.300 millones de toneladas de alimentos. De las cuales, 7,7 millones de toneladas son generadas en España, según datos de la FAO, la Agencia de Naciones Unidas para la Alimentación. Estas cifras colocan a España como el séptimo estado de la UE que más comida desperdicia. Un 84,2% de los productos que acaban en la basura va directamente de la nevera al cubo, sobre todo frutas, hortalizas y lácteos. El otro 15,8% se desecha después de cocinarlo. Por ese motivo, creemos que poniendo todos nuestro granito de arena desde casa y siendo conscientes de lo que compramos y lo que tiramos, podemos mejorar estos porcentajes, que siguen siendo muy elevados.

CONSEJOS

Una buena opción para disminuir el desperdicio de alimentos es realizar una lista de la compra teniendo en cuenta lo que hace falta en la despensa y la nevera. Organizar lo que vamos a comer durante la semana nos ayuda a planificar qué alimentos necesitaremos. Es importante no ir al supermercado con apetito, ya que aumenta la tentación de coger productos que no son necesarios y muchas veces son ultraprocesados, ricos en azúcares y harinas refinadas.

La conservación de los alimentos también es muy importante. Es recomendable colocar a la vista los que sean más perecederos. Muchas veces, los alimentos se caducan porque están escondidos al fondo de la nevera o la despensa y, cuando los encontramos, ya es demasiado tarde y tenemos que tirarlos. Además, una vez abierto el producto, es mejor reciclar el envase original y colocarlo en recipientes herméticos, como recipientes y botes de cristal con tapas. Otra opción para evitar el desperdicio de los alimentos es congelarlos, pero hay que tener en cuenta que una vez descongelados no se podrán volver a congelar, por riesgo a un crecimiento de carga microbiana en el producto. Es importante sacar el producto unas horas antes del congelador y cambiarlo a la nevera, nunca a temperatura ambiente, ya que las bacterias se multiplican rápidamente.

También podemos disminuir el desperdicio de alimentos ajustando las raciones que va a consumir cada persona. Muchas veces calculamos más cantidad por si nos quedamos con apetito y ese es uno de los principales motivos de desperdicio de alimentos en casa. Nuestro consejo es poner las cantidades en platos más pequeños. Nos ayuda a disminuir las porciones de comida ingerida y eso hará que no comamos más cantidad. Otra opción es aprovechar esas sobras que nos han sobrado para preparar otros platos al día siguiente o para compostar. Podemos dar una segunda vida a las cáscaras de huevos, la piel de fruta, la verdura y los tubérculos generando abono para el huerto o el jardín.

PLÁSTICOS

Otro cambio que deberíamos hacer por nuestro planeta es disminuir el plástico. Es muy importante reciclar todo el plástico que podamos y que no termine en el mar. Por ese motivo, os proponemos diferentes ideas para reducir el uso de plástico en casa: utilizar bolsas de tela para ir a la compra, elegir productos que no estén envueltos en plástico, guardar los productos en recipientes de cristal, utilizar bolsas de basura biodegradables e intentar evitar productos de un solo uso, como las pajitas o vasos de plástico.

¡Juntos podemos hacer un mundo mejor!