La historia de Fruites Bonany se remonta 50 años atrás. ¡Ni más ni menos! Jordi Vanrell Monroig puso en ese momento los cimientos de lo que hoy es y conocemos como Fruites Bonany. Jordi Vanrell estaba muy arraigado al pueblo de Petra, de donde originaria una familia. Petra en ese momento era una zona con una larga tradición agrícola, que daba ocupación a una gran parte de la población. Con el ánimo de sacar el mejor partido de los recursos de su pueblo natal, Jordi Vanrell empezó allí mismo su actividad comercial. Se destacó por la calidad de sus productos y su entusiasmo trabajador. Estas cualidades pronto le permitieron vender en los mercados de Palma. Unos años más tarde, se pudo instalar profesionalmente en MercaPalma, en calidad de mayorista de fruta y verdura.

La incorporación de sus hijos al negocio hizo posible abrir una línea comercial entre Illes Balears y la Península. Las nuevas generaciones, sin duda, habían heredado el espíritu innovador de Jordi Vanrell y esto, sumado a la profesionalidad de todo el equipo, convirtió a Fruites Bonany en una empresa puntera en su sector, cuyo esfuerzo ha posicionado el producto mallorquín en un altísimo nivel a lo largo de los años.

Hoy en día, la historia de Fruites Bonany continua viva gracias a que sigue innovando en materia de sostenibilidad y buenas prácticas medio ambientales, aplicando una agricultura y unos procesos de trabajo que permiten un desarrollo empresarial compatible con el respeto per nuestro entorno. ¡Continuamos escribiendo nuestra historia mirando hacia el futuro!