Origen

Los  beneficios de las espinacas han hecho a esta verdura muy popular en, prácticamente, cualquier región del mundo. Pero, ¿de dónde proceden realmente? Se cree que las espinacas proceden del sudoeste asiático. Fueron los árabes quienes en el siglo XI introdujeron la espinaca por primera vez en España. En la actualidad, los principales productores son Estados Unidos, Italia, Francia y Alemania.

Las espinacas se hicieron muy populares durante los años 30, gracias a un personaje de dibujos animados llamado Popeye. En sus aventuras, consumía una lata de espinacas y obtenía una gran fuerza. Siento comunicaros que eso es un mito, las espinacas no son de los vegetales que más hierro tienen, ni te dan la fuerza de Popeye. No obstante, no hay que desprestigiar a las espinacas, ya que poseen un alto contenido en fibra, vitaminas y minerales.

Valor nutricional
  • Contienen un gran porcentaje de agua: 89,6 %
  • Nos aportan pocas calorías: unas 22 kcal por 100 g de espinaca.
  • Aporta 2,5 g de proteína por 100 g de espinaca.
  • Aporta 2 g de hidratos de carbono por 100 g de espinaca.
  • Podemos destacar que aporta un gran porcentaje de fibra: aproximadamente, 2,7 g por 100 g de espinaca. ¿Sabías que los tallos son más ricos en fibra que las hojas?
  • Las espinacas presentan cantidades elevadas de vitamina A, K, E, C, algunas del grupo B y ácido fólico.
  • Las espinacas contienen gran cantidad de potasio, calcio, sodio, fósforo, hierro y magnesio.
Beneficios
  • Ayudan a mejorar el tránsito intestinal por su alto contenido en fibra.
  • Tienen acción antioxidante debido a su alto contenido en betacarotenos.
  • Son beneficiosas para la piel y el cabello.
  • Es recomendable el consumo de espinacas para las personas que padecen anemia o que tienen el hierro bajo. Consumirlas con alimentos ricos en vitamina C, como el pimiento rojo, aumenta la absorción del hierro.
  • Las espinacas son beneficiosas para las personas con diabetes porque contienen un bajo índice glucémico y ayudan a mantener los niveles normales de glucosa en sangre.
  • Mejoran la salud ósea por su contenido en calcio y vitamina K.
  • Reducen los niveles de colesterol.
  • Son beneficiosas para las mujeres embarazadas por su contenido en ácido fólico.

Es importante evitar comer espinacas en exceso, debido a su alto contenido en ácido oxálico que, combinado con otros minerales, produce oxalatos, que pueden provocar daños renales y problemas en las articulaciones. Los niños menores de un año no deberían consumir espinacas por su alto contenido en nitratos.

Al comprar espinacas, elige aquellas cuyas hojas tienen un color verde brillante, con tallos frescos y crujientes. La mejor forma de cocinarlas de forma rápida es hervirlas por 1 minuto sin taparlas y colarlas, no se deben hervir durante mucho tiempo, ya que pierde gran parte de sus nutrientes.

La mejor opción es almacenar las espinacas secas, guardarlas en la nevera sin lavar y en recipientes herméticos. Si observamos que tienen un color oscuro y un olor fuerte lo mejor es no consumirlas. Son verduras que se pueden congelar y conservan muy bien sus propiedades.

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Alejandra Pou Escarrer.

Nutricionista.