La sopa de cebolla es una receta clásica de la cocina francesa. Es bastante fácil de hacer y muy sabrosa. Su historia es muy interesante: este plato ganó fama en el siglo XIX, cuando se extendió la costumbre en París de tomar algo caliente en los sitios abiertos a altas horas de la madrugada; concretamente, en las tabernas y restaurantes que rodeaban el mercado central de abasto. La sopa de cebolla era un plato humilde elaborado con ingredientes sencillos que tomaban los trabajadores del mercado.
Ingredientes
- 2 cebollas medianas (mejor si son dulces).
- 1,5 L de caldo casero de carne o verduras.
- 1 vaso de vino blanco.
- 1 cucharada de mantequilla.
- 2 cucharadas de harina de trigo.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal y pimienta.
- Pan (se puede utilizar pan de ayer o de anteayer).
- Queso mozzarella rallado (el queso tradicional que se utiliza es el Grüyere).
Preparación
- Corta la cebolla estilo juliana, en tiras alargadas y muy finas. Luego ,en una olla, echa aceite de oliva y mantequilla. Calienta a fuego bajo, hasta que se derrita la mantequilla.
- Añade la cebolla, salpimienta al gusto y remueve de vez en cuando unos 10 minutos hasta que la cebolla esté blandita.
- Luego añade la harina y remueve mientras se va cocinando. Se deja 3 minutos y después se añade el vino blanco. Deja que se cocine 2 minutos más para que se evapore el alcohol.
- Echa el caldo caliente y remueve mientras se deja el fuego medio durante 15 minutos.
- Para terminar, coloca la sopa de cebolla en cuencos de cerámica individuales (importante que sean resistentes al horno), añade una rebanada de pan, por encima coloca el queso y gratina modo grill a 200 ºC.
- Disfruta de esta deliciosa sopa perfecta para los días de frío.